Miércoles Negro y Realidad Laboral Femenina

Bajo el lema # Ni una menos, el miércoles 19 de Octubre de 2016, se realizó una multitudinaria marcha. La misma se reforzó con un paro nacional de mujeres contra la violencia de género y abarcó a todo el país. El paro se llevó a cabo durante una hora y contó con el apoyo de organizaciones gremiales y sociales. El desencadenante para tales medidas fueron una serie de femicidios sucedidos en el país, agravándose en los últimos días con lo sucedido en Mar del Plata (asesinato de Lucía Pérez). La protesta bajo clima adverso, pedía justicia y políticas de estado para frenar la violencia de género y los femicidios.

Desde hace muchísimo tiempo las mujeres han luchado para posicionarse en la sociedad y equiparar sus derechos con los del hombre, lo que no les ha resultado nada fácil. A nivel laboral es sabido que, si bien  la mujer está mejor formada, aún sigue padeciendo brechas de género. Es cierto que la mujer ha aumentado su participación en el mercado laboral. En España, por ejemplo, de 35 % en 1985 al 68 % en 2016, aunque los empleos conseguidos en muchos casos, son temporales o parciales .

Por otra parte, la mujer cobra salarios inferiores y se ve perjudicada ya que debe hacerse cargo de, en la mayoría de los casos, las tareas domésticas. Tal como lo establace la Constitución Nacional Argentina los convenios  colectivos deben cumplir con el principio de igualdad de remuneración, por trabajo de igual valor.

La Ley de discriminación en el empleo prohíbe cualquier tipo de discriminación por razones de sexo. La ley también aclara que las mujeres no deben realizar trabajos arduos, insalubres o perjudiciales (Ley 11. 317 ), como la producción de alcohol o plomo; tampoco los trabajos en minas subterráneas y canteras .

Según Mora Blaser  (socióloga . Coordinadora del Observatorio Latinoamericano Género y Sociedad) para modificar la situación de la mujer, tan enraizada que facilita y habilita la violencia hacia las mujeres, son instituciones como la escuela, la familia y los medios de comunicación, los responsables de la construcción social de la subjetividad de las personas y las que tienen que trabajar en pos de la igualdad y la equidad de género. A esto se suman acciones activas que es necesario vislumbrar en las políticas públicas en todas las esferas de su acción. Es fundamental trabajar en las escuelas y en todos los niveles temas relacionados con la igualdad de género y la deconstrucción de estereotipos de género. Es necesario fortalecer acciones que conduzcan hacia una sociedad más justa, igualitaria y sin violencia.